Atlassian Rovo Studio es una de las apuestas más ambiciosas de Atlassian para integrar la IA en el trabajo diario de los equipos. No como un añadido externo ni como un experimento aislado, sino como una capa estructural que conecta personas, trabajo y conocimiento con contexto real. En este artículo repasamos cinco casos de uso con Rovo Studio, explicados con detalle y pensados para equipos que ya trabajan con Jira, Confluence o Jira Service Management.
Durante los últimos años, la IA se ha utilizado sobre todo como una herramienta externa. Abrimos un chat, copiamos contexto, pedimos ayuda y volvemos a nuestras herramientas habituales. Es útil, pero también fragmentado, repetitivo y difícil de escalar en organizaciones grandes.
Atlassian Rovo cambia este enfoque de raíz. Rovo Studio es el entorno de creación de Atlassian que permite diseñar agentes de IA y automatizaciones directamente dentro de Jira, Confluence y Jira Service Management, utilizando el contexto real del trabajo del equipo. La IA deja de ser un apoyo puntual y pasa a formar parte del propio sistema de trabajo.
Esto tiene una implicación importante: ya no se trata de “usar IA”, sino de decidir conscientemente qué partes del trabajo deben automatizarse, asistirse o reforzarse con contexto. Y ahí es donde Rovo Studio empieza a marcar la diferencia.
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¿Qué es Rovo Studio y para qué sirve?Rovo Studio es la herramienta de Atlassian desde la que se pueden crear agentes de IA, automatizaciones inteligentes y hubs de información que actúan directamente dentro del flujo de trabajo de Jira, Confluence y Jira Service Management.
No es un producto independiente ni un simple editor de prompts. Funciona como un taller centralizado para diseñar experiencias inteligentes que viven dentro del ecosistema Atlassian y utilizan sus mismos conceptos: issues, páginas, servicios, equipos y objetivos.
La clave de Rovo Studio está en su conexión con el Teamwork Graph, la capa de datos de Atlassian que relaciona trabajo, conocimiento y personas. Gracias a esta base, los agentes creados en Studio no responden en abstracto: entienden el contexto real de la organización, saben dónde está la información relevante y cómo se conectan los distintos elementos del trabajo diario.
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Rovo Studio reúne en un solo lugar varias capacidades clave que antes estaban dispersas:
Esta combinación permite pasar de automatizaciones aisladas a experiencias coherentes de IA dentro del trabajo diario.
A continuación vamos a repasar cinco casos de uso con Atlassian Rovo Studio.
Desde Studio se pueden prototipar agentes, definir automatizaciones, ajustar comportamientos y gobernar el uso de la IA desde un único punto. Para escenarios más avanzados, la integración con Forge permite extender capacidades, pero el valor principal está en que el punto de entrada es accesible y controlado.
Un agente de onboarding creado con Rovo Studio sirve para centralizar preguntas frecuentes, procesos y documentación interna, ayudando a que los nuevos empleados ganen autonomía desde el primer día.
El onboarding suele fallar por los mismos motivos: información dispersa, documentación desactualizada y una fuerte dependencia de personas concretas. Con un agente entrenado con los espacios adecuados de Confluence —políticas internas, procesos, herramientas y cultura—, las respuestas son coherentes, accesibles y siempre alineadas con la fuente oficial.
Este tipo de agente no sustituye el acompañamiento humano, pero elimina una gran cantidad de fricción inicial. El equipo recibe menos interrupciones, las nuevas incorporaciones avanzan más rápido y la experiencia de onboarding se vuelve más predecible y escalable.
Los agentes de Rovo permiten resumir automáticamente tickets complejos en Jira, extrayendo el problema principal, las decisiones clave y el estado real del trabajo.
En muchos equipos, entender el contexto de un issue puede llevar más tiempo que resolverlo. Comentarios largos, cambios de alcance y conversaciones cruzadas convierten los tickets en auténticos historiales difíciles de digerir. Los agentes de síntesis ayudan a recuperar rápidamente el hilo, especialmente en cambios de responsable, handovers o rotaciones de guardia.
El resultado es menos tiempo leyendo y más tiempo resolviendo, algo especialmente valioso en entornos donde la velocidad y la claridad marcan la diferencia.
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Rovo Studio permite crear automatizaciones en Jira Service Management que combinan reglas clásicas con agentes de IA capaces de interpretar lenguaje natural.
Esto abre la puerta a flujos más inteligentes que van más allá del “si pasa X, haz Y”. Por ejemplo, analizar el texto de una solicitud entrante, extraer el problema principal, generar un resumen interno y enriquecer el ticket antes de asignarlo. Todo esto ocurre sin eliminar el control humano, pero sí reduciendo el trabajo repetitivo.
Para los equipos de soporte, esto se traduce en tickets más claros desde el primer contacto y una experiencia más profesional para el usuario final.
Con Rovo Studio es posible crear agentes de IA que transforman trabajo diario en documentación estructurada dentro de Confluence.
Decisiones tomadas en tickets, aprendizajes de retrospectivas o soluciones recurrentes pueden convertirse en borradores de documentación sin esfuerzo adicional. La IA no decide qué es verdad, pero sí ayuda a capturar conocimiento que de otro modo se perdería.
Este enfoque reduce la dependencia de la memoria individual y convierte la documentación en un subproducto natural del trabajo, no en una tarea pendiente eterna.
Los Company Hubs de Rovo Studio permiten centralizar información verificada en Confluence y utilizarla como referencia tanto para personas como para agentes de IA.
En organizaciones grandes, la falta de una fuente única de verdad genera ruido, desconfianza y decisiones inconsistentes. Los hubs ayudan a ordenar ese caos, ofreciendo espacios curados donde la información clave está clara, actualizada y contextualizada.
Además, cuando los agentes de IA se apoyan en estos hubs, la calidad y la fiabilidad de sus respuestas mejora de forma notable.
Un aspecto clave de Rovo Studio es que permite escalar el uso de agentes de IA sin perder control, centralizando la gobernanza y el acceso a los datos.
En lugar de agentes dispersos y difíciles de auditar, Studio ofrece un punto único desde el que definir quién puede crear qué, con qué alcance y sobre qué información. Esto es fundamental en organizaciones donde la IA debe ser potente, pero también comprensible y alineada con los procesos internos.
La gobernanza no frena la innovación; la hace sostenible.
Rovo Studio no es un producto cerrado, sino la base sobre la que Atlassian está construyendo su visión de la agentificación del trabajo. La combinación de agentes, automatizaciones, hubs y extensiones abre escenarios que van mucho más allá de los casos actuales.
Empezar ahora, con problemas bien definidos y objetivos claros, es la mejor forma de prepararse para un futuro en el que los agentes de IA formen parte natural de los equipos.
En esencia, Rovo Studio es la forma que tiene Atlassian de integrar la IA en Jira, Confluence y Jira Service Management como parte del sistema de trabajo, no como una herramienta externa.
Si quieres conocer qué más puedes conseguir gracias a Rovo Studio, estamos siempre disponibles.
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